En Estados Unidos, muchas personas se preguntan si la apnea del sueño puede curarse. Se trata de un trastorno del sueño frecuente pero potencialmente grave que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se calcula que la apnea obstructiva del sueño afecta al 26% de las personas de entre 30 y 70 años en Estados Unidos.
Si no se trata, puede provocar diversos problemas de salud, como cardiopatías y accidentes cerebrovasculares.
Pero, ¿cómo saber si usted o un ser querido padece apnea del sueño? En esta entrada del blog, hablaremos de los síntomas comunes de esta afección y de si se puede curar o tratar.
¿Qué es la apnea del sueño?
La apnea del sueño es un trastorno común del sueño que se produce cuando una persona tiene interrupciones repetidas de la respiración durante el sueño. Pero, ¿por qué? Bueno, tu cerebro te despierta para protegerte cuando dejas de respirar mientras duermes. Pero, por otro lado, esto te impide tener un sueño reparador y, sobre todo, conseguir un sueño profundo.
Estas interrupciones, o apneas, pueden durar desde unos segundos hasta minutos y pueden producirse varias veces en una hora.
La apnea del sueño puede provocar diversos problemas de salud, como somnolencia diurna excesiva, dolores de cabeza, irritabilidad y dificultad para concentrarse. Además, si no se trata, la apnea del sueño puede aumentar el riesgo de padecer problemas de salud graves como hipertensión, cardiopatías y accidentes cerebrovasculares.
Apnea obstructiva del sueño frente a apnea central del sueño
La apnea del sueño puede ser apnea obstructiva del sueño (AOS) o apnea central del sueño (ACS). He aquí un resumen de cada una de ellas:
- La apnea obstructiva del sueño (AOS) es la forma más frecuente de apnea del sueño y representa aproximadamente el 90% de los casos. Se produce cuando los músculos de la parte posterior de la garganta se relajan durante el sueño, provocando el estrechamiento o cierre de las vías respiratorias.
- Como resultado, el individuo no puede respirar correctamente, disminuyendo los niveles de oxígeno en sangre. El cerebro envía entonces una señal para despertar parcialmente a la persona a fin de que abra las vías respiratorias, lo que suele ir acompañado de un resoplido o un jadeo. Este ciclo puede repetirse varias veces a lo largo de la noche, alterando la calidad del sueño y provocando fatiga diurna.
Los factores de riesgo de la AOS son la obesidad, los antecedentes familiares, el consumo de alcohol, la congestión nasal, el envejecimiento y el tabaquismo.
- La apnea central del sueño (AAC) es un tipo menos frecuente de apnea del sueño que se produce cuando el cerebro no envía señales a los músculos que controlan la respiración durante el sueño. A diferencia de la AOS, la apnea central del sueño no está causada por una obstrucción física de las vías respiratorias.
Se trata más bien de un problema neurológico que afecta al centro de control respiratorio del cerebro. Además, el CSA suele asociarse a otras afecciones médicas como la insuficiencia cardiaca, el ictus y el consumo de opiáceos.
También existe la apnea del sueño mixta, en la que una persona puede padecer ambos tipos de apnea del sueño, AOS y SAOS.
Síntomas de la apnea del sueño
Estos son los 10 síntomas más comunes de la apnea del sueño a los que debe prestar atención:
- Ronquidos fuertes: Los ronquidos pueden ser un signo revelador de apnea del sueño. Si tú o tu pareja notáis ronquidos interrumpidos por periodos de silencio seguidos de jadeos o ahogos, quizá sea el momento de consultar a un médico.
- Jadeo o ahogo durante el sueño: Como resultado de la interrupción de la respiración, las personas pueden despertarse jadeando o ahogándose mientras su cuerpo intenta reanudar la respiración.
- Despertares frecuentes o insomnio: Las constantes interrupciones causadas por la apnea del sueño pueden provocar dificultades para conciliar el sueño o permanecer dormido durante toda la noche.
- Dolores de cabeza matutinos: Despertarse con dolores de cabeza puede ser un signo de apnea del sueño, a menudo debido a la reducción de los niveles de oxígeno en la sangre durante la noche.
- Somnolencia y fatiga diurnas: La mala calidad del sueño y la respiración interrumpida pueden hacer que te sientas excesivamente cansado y somnoliento a lo largo del día.
- Dificultad para concentrarse: La función cognitiva puede verse afectada por la mala calidad del sueño y la reducción de los niveles de oxígeno, lo que dificulta que las personas con apnea del sueño se concentren y piensen con claridad.
- Irritabilidad o cambios de humor: La falta de sueño causada por la apnea del sueño puede provocar irritabilidad, cambios de humor o depresión.
- Boca seca o dolor de garganta al despertar: Respirar por la boca mientras se duerme debido a la obstrucción de las vías respiratorias puede provocar sequedad de boca o dolor de garganta por la mañana.
Ahora ya sabe a qué síntomas debe prestar atención. Pero, ¿se puede curar la apnea del sueño?
¿Se puede curar la apnea del sueño?
La verdad es que no. Ni la AOS ni la ASI son totalmente curables, pero un tratamiento adecuado puede controlar los síntomas de forma eficaz. La gravedad y la frecuencia de los síntomas pueden reducirse con intervenciones adecuadas, mejorando la calidad de vida de las personas afectadas por la apnea del sueño.
En algunos casos, se ha descubierto que la cirugía bariátrica mejora o incluso "cura" significativamente la apnea del sueño, sobre todo cuando se trata de apnea obstructiva del sueño (AOS). La razón principal es la reducción del exceso de peso corporal, que puede aliviar la presión sobre las vías respiratorias y mejorar la respiración durante el sueño.
Sin embargo, es esencial tener en cuenta que no todos los pacientes que se someten a cirugía bariátrica experimentarán el mismo grado de mejora de su apnea del sueño. Los resultados pueden variar en función de factores como el peso de la persona, su estado general de salud y la gravedad de su apnea del sueño.
Aunque la cirugía bariátrica puede ser una opción de tratamiento satisfactoria para algunos, no es una cura garantizada para la apnea del sueño.
Es crucial comentar las posibles opciones de tratamiento con un profesional sanitario para determinar el mejor curso de acción en función de las circunstancias específicas de cada persona.
Tratamientos de la apnea del sueño.
Existen diferencias en los tratamientos de la apnea obstructiva del sueño (AOS) y la apnea central del sueño (ACS), principalmente porque las causas subyacentes de estas afecciones son diferentes.
Los tratamientos para la AOS pueden incluir:
- Cambios en el estilo de vida: Perder peso, evitar el alcohol y las drogas, dejar de fumar y adaptarse a dormir de lado pueden ayudar a reducir los síntomas de la AOS.
- Tratamiento con presión positiva continua en las vías respiratorias(CPAP): La CPAP es un tratamiento estándar para la AOS en el que la persona lleva una mascarilla sobre la nariz o la boca mientras duerme, que proporciona un flujo constante de aire a presión para mantener abiertas las vías respiratorias.
- Aparatos bucales: Los aparatos bucales especialmente diseñados pueden ayudar a recolocar la lengua y la mandíbula para mantener abiertas las vías respiratorias y evitar el atragantamiento.
- Cirugía: En algunos casos extremos, pueden recomendarse procedimientos quirúrgicos para eliminar el exceso de tejido o corregir las anomalías estructurales causantes de la AOS.
Los tratamientos para el CSA pueden incluir:
- Tratar la enfermedad subyacente: Abordar la causa fundamental de la ASI, como la insuficiencia cardíaca, puede ayudar a aliviar los síntomas.
- Presión positiva binivel en las vías respiratorias(BPAP): Similar a la ASV, la BPAP es una terapia de ventilación no invasiva utilizada principalmente para tratar la apnea del sueño y otras afecciones respiratorias que implican dificultad para respirar.
- Servoventilación adaptativa (ASV): Este tratamiento consiste en un dispositivo que monitoriza y responde a los patrones respiratorios de la persona para proporcionar el nivel adecuado de presión de aire, ayudando a estabilizar la respiración.
- Medicamentos: En algunos casos, puede recetarse acetazolamida para estimular la respiración en personas con ASI y AOS.
En conclusión, la apnea del sueño es un trastorno grave y frecuente que afecta a millones de personas. Aunque no puede curarse del todo, afortunadamente la apnea del sueño puede tratarse y controlarse con la ayuda de un profesional médico.
Comprendiendo las diferencias entre la apnea obstructiva del sueño (AOS) y la apnea central del sueño (ACS), reconociendo los síntomas comunes y buscando asesoramiento profesional, las personas pueden determinar el plan de tratamiento más adecuado para su situación.
Si sospecha que usted o un ser querido puede padecer apnea del sueño, hable con su médico para discutir las opciones de diagnóstico y tratamiento.
Descargo de responsabilidad: La información proporcionada en este artículo tiene únicamente fines informativos y no pretende sustituir el consejo, diagnóstico o tratamiento médico profesional.